A diario vemos como la mayoría de personas repiten las mismas cosas desde hace mucho tiempo, miramos rostros resignados a vivir en esta realidad, sin ánimos de mejorar.
¿Qué está pasando con nuestra mente creativa? ¿Qué está pasando con nuestros sueños y aspiraciones? ¿Dónde hemos dejado nuestras ganas de cambiar el mundo?.

A menudo discutimos con nuestra mente creativa y le damos la razón a la mente tradicional, todos en algún momento sacamos a nuestra mente creativa de paseo y a la tradicional la mantenemos trabajando casi siempre.

Nos regimos a las reglas de esta sociedad que no están mal, es parte del proceso, lo que está mal es reposar eternamente en la misma órbita sin miras a futuro.
Esto sucede ya que desde niños hemos caminado en una competencia constante, tratando de ser mejor que los demás, luchando por sacar las mejores calificaciones a toda costa focalizándonos en números, como si los números definieran nuestra capacidad intelectual.

Construyendo un sueño para la sociedad y dejando a un lado nuestras pasiones, y cuando al fin creemos que hemos alcanzado el máximo nivel de estudios nos damos cuenta que no tuvimos tiempo para desarrollar nuestras habilidades creativas.

¿Qué está pasando con nuestros sueños y aspiraciones?

Y aun así seguimos pensando que es tarde, es tarde porque nuestra mente se acostumbró a pensar así, que siempre será tarde para nosotros, y que cualquier cosa tendrá mayor importancia que nuestros sueños.

“Educar no es un acto de consumir ideas sino de crearlas y recrearlas” una frase pronunciada por Paulo Freire, un educador brasileño del siglo XX. Quien cree que la educación debe fomentar al desarrollo de la creatividad.
Crear ideas es parte de la educación, ayudar a que las futuras generaciones utilicen su creatividad y amplíen estrategias para lograr un mundo más consciente y emprendedor. Donde no exista el miedo a intentar hacer algo, pero algo que realmente nos haga felices y sea productivo.

Empecemos ahora a sembrar una semilla de valor en la mente de los pequeños que son quienes construirán sus sueños en base a nuestras enseñanzas.

Hagámoslo con el ejemplo nunca es tarde para ir tras tus ideales, mientras vivas procura hacer algo que pueda cambiar nuestro entorno y que garantice que tu paso por el mundo no fue una casualidad sino un propósito de vida.