Casi sin darse cuenta muchos padres suelen complacer a sus hijos en la mayoría de sus peticiones, haciendo de ellos «niños mimados«.

bchis_web_011_900x800Tratan de darles todo lo que piden, olvidando que su principal función es prepararlos para el mundo real. Mimarlos demasiado puede resultar un problema difícil de controlar.
“No quiero ponerme esa ropa” “No me quiero bañar” “Quiero ver dibujos” “Quiero utilizar tu celular, pero no quiero comer” frases comunes de muchos niños, quizá detalles muy pequeños que al final terminan influyendo de manera poderosa en su comportamiento a futuro.

Hay algo que es muy claro; los niños mimados se hacen y no nacen, sin duda muchos padres pierden el control cuando los niños empiezan a adquirir conductas extrañas y extremadamente rebeldes.
Cuestionándose los errores que pudieron haber cometido al educar a sus niños.
¿Qué pasa cuando los niños toman el control de la familia?
Es importante tener en cuenta que si los padres siempre hacen lo que el niño quiere, están impulsando para que en un futuro sea una persona intolerante y posesiva. Desde luego el niño desconocerá del esfuerzo que se requiere para conseguir algo.

Cuando el pequeño no acepta un no, armará un berrinche buscando apoyo de alguien que socorra su petición, si percibe que no lo consigue, dejará de actuar así.

Pero si dentro de esto se sale con la suya, la próxima vez que quiera algo actuará de la misma forma o con un berrinche mucho más exagerado.
Es importante conocer y actuar de acuerdo a sus sentimientos y deseos, de una manera adecuada.
Algunos padres la mayor parte de tiempo se ocupan en su trabajo y no suelen pasar tiempo con sus hijos, en compensación a eso llenan vacíos consintiéndolos en todo.
Lo más sano y productivo que se puede hacer por los pequeños es valorándolos atención y seguridad, pero nunca dejar que sean ellos quienes tomen el mando.

Para eso debes tener en cuenta varias posiciones frente a tus pequeños:

No compres con frecuencia a tus hijos regalos que no necesitan, enséñales a valorar las cosas.

Ignora las quejas que tus hijos hacen, muchos pequeños suelen utilizar las frases “pero mis compañeros no tienen que hacer eso” “los padres de mis amigos si les permiten….” Cuando tus niños digan eso, haz referencia que cada niño debe cumplir las reglas de su familia.

Evita dar largas explicaciones para decir que no, es necesario que tu hijo entienda que tu estas a cargo.

Enséñales a asumir pequeñas responsabilidades de la casa, cuando el niño te pida algo, pídele primero que te ayude con alguna actividad, de esta manera el entenderá la importancia de contribuir con su familia.
Establece reglas y demuéstrales lo importante que es cumplirlas, recuerda que el niño imitara tus acciones. Sé un buen ejemplo.

Ten en cuenta que decir “no” no significa ser malo, es necesario establecer límites y reglas, acompañados de un dialogo.

Los niños tienen una capacitada demasiado amplia para captar mensajes a la primera. Esto ayudará a que asimilen de manera positiva todo lo que tú quieres trasmitir.
Deja que tu hijo exprese todo lo que tenga que expresar, no cortes sus alas ni hagas de el un niño frágil.
Prepara a tu pequeño para cuando tenga un problema, en la vida hay que aprender a ganar y a perder pero nunca dejar de intentarlo. Trata de sembrar en tus niños la idea de superación pero sin hacer daño a nadie.